«Esto es una universidad, no un colegio de curas», subraya la presidenta de la FEUC, Sofía Barahona. Los estudiantes realizarán hoy una concentración en la casa central para protestar por lo ocurrido.
SANTIAGO.- Indignados están en la Federación de Estudiantes de la U. Católica (FEUC) pues aseguran que las autoridades de esa casa de estudios les negaron el permiso para realizar una feria sobre diversidad sexual.
La actividad estaba organizada para el viernes pasado y en ella tenían previsto que participaran distintas organizaciones, como Iguales y Todo Mejora, pero nada de eso ocurrió.
Según indican en la FEUC, el 2 de mayo ingresaron la solicitud para realizar la actividad ante la Secretaría General de la universidad. Días más tarde, la entidad les solicitó más antecedentes sobre la feria, los que fueron entregados por la federación. Sin embargo, –dicen los estudiantes– el 16 de mayo la instancia no les otorgó el permiso, sin detallarles las razones.
Ante esto, la FEUC solicitó una reunión para aclarar el tema y allí –aseguran– se les señaló que la U. Católica «no permite que se realicen actividades que no sean de índole académica en sus dependencias». «La secretaria general nos dijo que había conversado este tema específico con el rector y que habían decidido que no era una actividad académica y, por lo tanto, no se iba a autorizar», señaló a Emol la presidenta de la FEUC, Sofía Barahona. «La religión católica no puede ser un límite a las distintas posturas que hay en una universidad; la universidad, antes de católica, es una universidad, no un colegio de curas»
Sin embargo, la explicación no convenció a la FEUC, pues indican que ya habían realizado otras actividades similares donde abordaban otros temas, como una feria de sustentabilidad y otra de iniciativas sociales, y no habían tenido ningún problema con utilizar el espacio.
Por eso, enviaron un nuevo mail a la secretaria general pidiendo que les enviara por escrito las razones de la negativa, pero ésta no les habría respondido. «Como no nos respondía, fuimos a la oficina y la secretaria general nos vio y dijo ‘a no, yo no quiero hablar con ustedes’ y se entró a su oficina y no nos dio ninguna explicación», relató la presidenta de la FEUC, quien dice que todavía no tienen ninguna respuesta ni de ella ni del rector.
La estudiante afirma que están «bastante enojados y molestos» con lo ocurrido. «Nos sorprende que en el siglo XXI todavía existan esta clase de actitudes. Nosotros creemos que la religión católica no puede ser un límite a la diversidad y a las distintas posturas que hay en una universidad, porque la universidad, antes de católica, es una universidad, no un colegio de curas», subraya.
También dice que les molesta que «se trate de ocultar la verdadera razón que hay detrás para no darnos el permiso» y sostiene que seguirán luchando para que la U. Católica «sea una universidad verdaderamente pluralista, inclusiva y democrática». Tras lo ocurrido, tanto estudiantes como funcionarios y representantes de la Fundación Iguales, realizarán este mediodía una concentración en la casa central de la U. Católica para protestar por la situación.